miércoles, 5 de noviembre de 2014

"Manifiesto pedagógico No es verdad" (Actividad de reflexión y análisis 6)

     El Manifiesto Pedagógico “No es verdad”, promovido por la red INRES (Investigación y Renovación Escolar) es un documento firmado por distintos colectivos (docentes, madres, padres, estudiantes y ciudadanía en general) que se sienten preocupados y molestos por la difusión de creencias sobre la escuela pública española que distorsionan gravemente la realidad, generalizando una forma de pensar en torno a la educación poco fundamentada y pobremente argumentada. Así, hacen pública su opinión afirmando lo siguiente en torno a estas creencias que determinadas personas vierten acerca del sistema educativo:

NO ES VERDAD que en la escuela española actual predomine un modelo de enseñanza diferente al tradicional.

NO ES VERDAD que en la escuela española hayan bajado los niveles de exigencia.

NO ES VERDAD que los alumnos y alumnas de ahora sean peores que los de antes.

NO ES VERDAD que los docentes españoles tengan un exceso de formación pedagógica y un déficit de formación en contenidos.

     A modo de conclusión afirman que “La escuela y la universidad necesitan un cambio”, y especifican algunos principios orientadores sobre los que la escuela debería regirse:

1. Centrada en los estudiantes y en su desarrollo integral (corporal, intelectual, social, práctico, emocional y ético).
2. Con contenidos básicos vinculados a problemáticas relevantes de nuestro mundo, buscando la calidad frente a la cantidad, la integración de materias frente a la separación.
3. Con metodologías investigativas que promuevan aprendizajes concretos y funcionales, al mismo tiempo que capacidades generales como la de aprender a aprender. Donde el esfuerzo necesario para aprender tenga sentido.
4. Con recursos didácticos y organizativos modernos y variados. Una escuela que utilice de forma inteligente y crítica los medios tecnológicos de esta época.
5. Con formas de evaluación formativas y participativas que abarquen a todos los implicados (estudiantes, docentes, centros, familias y administración), que impulsen la motivación interna para mejorar y que contemplen a las personas en todas sus dimensiones.
6. Con docentes formados e identificados con su profesión. Mediadores críticos del conocimiento. Dispuestos al trabajo cooperativo y en red. Estimulados para la innovación y la investigación.
7. Con una ratio razonable y con profesorado ayudante y en prácticas. Con momentos para diseñar, evaluar, formarse e investigar.
8. Con un ambiente acogedor, donde los tiempos, espacios y mobiliarios estimulen y respeten las necesidades y los ritmos de los menores.
9. Cogestionada con autonomía por toda la comunidad educativa. Que promueva la corresponsabilidad del alumnado. Comprometida con el medio local y global.
10. Auténticamente pública y laica. Con un marco legal mínimo basado en grandes finalidades y obtenido por un amplio consenso político y social.


     El análisis del contenido de este manifiesto comenzó en un principio a modo de trabajo grupal durante la clase de Procesos y contextos educativos, en el que cada miembro del grupo debía desarrollar una de las ideas en concreto. Por eso, pasaré a comentar la afirmación en la que yo me centré, dentro de mi grupo:

NO ES VERDAD que los docentes españoles tengan un exceso de formación pedagógica y un déficit de formación en contenidos.

     En mi opinión, el efecto que se produce en este momento en la educación en España es justamente el contrario. Los profesores de secundaria poseen amplios conocimientos en la materia que imparten y sin embargo sus competencias en materia pedagógica son prácticamente nulos. Esta es una de las razones por las que, en teoría, decidió imponerse el Máster del profesorado. Sin embargo, habrá que esperar unos años para valorar si este cambio alcanza los objetivos deseados. Pero este cometido será muy difícil si tenemos en cuenta que los profesores de universidad, que se supone deben formar a los futuros docentes, no han necesitado cursar absolutamente ninguna formación pedagógica.

     Además, la educación de los docentes es predominantemente teórica, estando muy poco vinculada a los centros educativos en los que posteriormente van a tener que ejercer su labor profesional. Tratándose de una profesión eminentemente práctica debería ser requisito imprescindible desarrollar habilidades procedimentales que serán muy difíciles de adquirir si no es a través de la práctica misma.

No hay comentarios:

Publicar un comentario